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Políticamente... conservador

Los orígenes religiosos de la Revolución Francesa

 

Los orígenes religiosos de la Revolución Francesa
Autor: Dale K. Van Kley
Editorial: Ediciones Encuentro

 

Ahora que estamos empeñados en la reconstrucción de Europa, y que algunos legitimistas del nuevo orden –no sólo de las incorporaciones sino de los fundamentos– no hacen más que cacarear las raíces ilustradas y de modernidad, como fuente de sentido para eso y esto que llamamos Europa, no está de más acercarnos a la historiografía más novedosa, y por ende polémica, sobre la Revolución Francesa; es decir, sobre las ideas ilustradas, modernas a la par, que cristalizaron en un amplio y desigual proceso histórico que, para muchos, sigue siendo, aun hoy, el antecedente inmediato de nuestros regímenes, sistemas de vivencia y convivencia, y de los fundamentos de este orden prescrito y, probablemente, proscrito, nacional y supranacional.

 

¿Sobre qué principios se construyó la Revolución Francesa? ¿Cuáles fueron los motores de ese cambio político y social? ¿Cuáles sus corrientes internas y externas? La caída del muro de Berlín del predominio marxista en la interpretación de los orígenes de la Revolución Francesa –la de los principos universales de igualdad, libertad y fraternidad– nos ha permitido en los últimos años, también en la historiografía en lengua española, un nuevo horizonte de comprensión a partir de los estudios de varios historiadores, entre los que obligatoriamente hay que citar a Francois Furet. Muchos de ellos, superada la etapa en la que se pensaba que todo lo que pasó se había interpretado como una victoria de la burguesía capitalista en ciernes sobre la nobleza neofeudal que presentaba y representaba al Antiguo Régimen, no tuvieron otro remedio que recordar lo que Alexis de Tocqueville escribió en El Antiguo Régimen y la Revolución Francesa sobre los antecedentes y efectos de la citada revolución. Rota la miopía economicista, pasaron a primer plano la lupa religiosa, social y cultural.

 

El análisis de los motores del cambio histórico, que hizo posible el cambio político y social francés, se amplió, por tanto, con la paleta de lo religioso y lo social. Es en este contexto en el que hay que dar el valor que tiene a la discutible y apasionante a aportación de Dale K. Van Kley, en la que nos explica cuáles fueron los actores religiosos y los caldos de cultivo más adecuados para las ideas ilustradas, y los procesos políticos que desarrollaron esas ideas. Si bien es cierto que el problema con el que nos encontramos, después de aceptar la tesis de que en la génesis de la Revolución Francesa existe un origen religioso, incluso cristiano, es definir de qué religión estamos hablando y de qué cristianismo. El autor, de formación y confesión calvinista, no obvia este hecho, a la hora de interpretar el rol que habían jugado, en los períodos previos al estallido revolucionario, tanto la monarquía católica francesa –con sus peculiaridades–, como el episcopado, los jesuitas, los jansenistas, los protestantes calvinistas, y un sinfín de partidos, denominaciones y agrupaciones que complicaban los movimientos en el tablero pre y post revolcuionario. Si bien es cierto que hay que destacar el análisis que hace de la influencia de la fe cristiana en la conformación de las facciones y los partidos revolucionarios, incluso en la influencia positiva y negativa en el pensamiento de los nuevos filósofos.

 

Hay que agradecer a Ediciones Encuentro esta contribución a la clarificación de este período, así como la presentación, que firma el profesor Gallego, en la que aclara no sólo el sentido y valor de este libro, además de interpretar, orientar y proyectar algunas ideas que facilitan una lectura crítica del texto: como recuerda el profesor Gallego, en el contexto de las relaciones entre el cristianismo y la democracia moderna, fueron «los teólogos católicos del siglo XVI los que se habían adelantado a definir la naturaleza pactista de la sociedad política». Hecho que olvidamos con demasiada frecuencia...

 

José Francisco Serrano 
 

 

 
 

 

 

 
 

 

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